viernes, 22 de junio de 2007

Guardando para el invierno.

Economia irracional.

Si alguien llego a este post por un enlace de buscador , y busca una reflexion economica, cierre esta ventana y vuelva a buscar.
La sensacion que genera que estas letras corran graciosamente desde mi teclado a la web es de sentir que empiezo a guardar cosas que nunca ocupare.
Aquella musica que renueva mi aire, aquellos momentos que en compañia serian felices, y que en vano guardo en algun lugar en la espera que alguien los disfrute conmigo.
Ya me paso con Holden, un grupo frances, que tengo la seguridad que en otra compañia, distante , lejana, preterita y por cierto añorada con cada celula de mi cuerpo, habria sido goce de ambos.
Si, exatrño esa conversacion, extraño la cara de sorpresa, la frescura de esa sonrisa, y empiezo a cuestionarme mis desiciones.
Acabo de cerrar el prorama de correo electronico en el momento justo que en mi mente corria una carte de reencuentro.
Los recuerdos son trampas crueles: caes en ellos con anta racia, con tanta felicidad, sin sospechar el filo de la realidad que esconden.
Es por cierto, la inutilidad de deshacerse de la felicidad incompleta, inutil.
En alguna parte del camino olvide a disfrutar de la vida solo.
Y tú, me vienes a torturar en cada cosa maravillosa que vivo sin ti.

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